Cada 11 de octubre se conmemora el Día del Martillero Público y Corredor Inmobiliario, en conmemoración de la Asamblea Constitutiva de pioneros de la profesión. Franco López, un especialista saladillense en el rubro, habló con ABC Saladillo sobre las problemáticas y oportunidades del sector.
“El ladrillo que es lo que históricamente en Argentina te da más seguridad”, admite López, quien además dejó “un saludo para todos los colegas, y los colegas amigos también, mandándoles un feliz día para todos y que el año que viene sea mucho mejor para la profesión y para todos”.
En principio, Franco López fue consultado por los medios de atención: se trabaja con la atención presencial en Mitre 3161, de lunes a viernes de 8:30 a 12:30, y de manera virtual al: (2345)455104, para llamadas o mensajes por WhatsApp, al mail [email protected] o en el sitio web www.francolopez.com.ar
A propósito de la situación de pandemia, López admitió que “es difícil para todos, no sólo para el sector inmobiliario. Creo que hay que entender un poco la situación y adaptarse también, porque en el sector inmobiliario siempre surgen oportunidades: el que se las quiere rebuscar porque el dólar está con un acceso difícil para todos, puede resguardarse en el ladrillo que es lo que históricamente en Argentina te da más seguridad. El que tenía un acceso al ahorro en dólar, hoy está volviendo a volcarse en el ladrillo”.
López diferenció la realidad de diferentes sectores inmobiliarios: “Algunos nos dedicamos más al alquiler, otros nos dedicamos más al campo y otros a la venta: puede haber un dinamismo en distintos colegas, pero hay oportunidades si le ponemos optimismo a este año terrible. Va a haber inmobiliarias dedicadas a ciertos mercados que van a ir en baja, otros en alta y otros estabilizados”.
En ese sentido, continuó: “Eso hablando del sector inmobiliario, porque en cuanto a la economía del país, se estima en el mundo que los países que están fuertemente acomodados económicamente van a tener una W, una baja y rebote. A Argentina, según escuchaba a una financista, nos estimaron la letra K, que tiene una pata para arriba y otros para abajo. Va a haber algunos sectores que van a repuntar muy bien, y otros que van a ir a la baja. No tenemos un índice sobre que nos va a ir muy mal o muy bien. Esto por la pandemia, claro está. El país no es predecible y en este contexto mucho menos. No hay una seguridad sobre qué va a pasar”.
Al ser consultado por la aplicación de la Ley de Alquileres, López afirma que “todavía es bastante compleja, pero es un punto de partida para reorganizar un poco. Hay mucho debate sobre eso. Es muy reciente para hacer un diagnóstico de si realmente es la mejor ley, o si como estábamos estaba bien, pero la ley está y llegó para aplicar cambios que se están dando. Como por ejemplo al aumento que se realiza anualmente por un índice que va a publicar el Banco Central, antes uno tenía un ajuste escalonado, sabía cuánto iba a pagar y el propietario sabía cuánto iba a ganar. Pero está y cuando se cumpla un año, el 31 de julio de 2021, analizaremos cómo se acomodó la economía tanto del inquilino como del propietario”.
Luego, fue consultado por la situación del dólar con sus restricciones y subas: “Es increíble como el argentino, cuando le dan un tiempito de estabilidad, se anima a invertir y querer progresar. A pesar del contexto mundial que estamos viviendo todos, en los últimos tres meses propiedades que tenían una financiación con una cuota de 200 dólares por mes se animaba, porque fueron cuatro o cinco meses que uno podía comprar el dólar ahorro. Luego del anuncio de no poder acceder tan fácilmente, con algunas restricciones, la gente se asustó, se disparó un poco el dólar y calmó el ánimo de la gente que pensaba ‘sé que los 200 dólares por mes los puedo comprar y los puedo pagar, me meto en algo financiado en dólares’. Cualquier movimiento afecta”.
“Independientemente del valor, y esto es a título personal, mientras no sea algo descabellado, a la gente si le das una estabilidad, la gente se anima. El blue está $168, y si es caro pero le das estabilidad, igual la gente se anima. En mi caso, tuve muchas ventas que fueron por la tranquilidad de saber que iban a poder comprar los dólares. Pero tenemos un país en el que la economía es muy inestable, lo que conlleva que muchas operaciones se caigan por eso”, sumó.
