Argentina busca la semifinal y Messi, el récord

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La Selección y Messi intentarán hoy combatir con victoria y con récords a esos fantasmas que sobrevolarán el césped del Gillette Stadium. Nunca se borrará aquella imagen de Maradona caminando de la mano de una enfermera, luego de un estruendoso triunfo ante Nigeria y rumbo a un control antidóping que lo sacaría de un Mundial 94 que desbordaba de ilusiones y que le marcaría su última vez con la celeste y blanca. Sin embargo, en este mismo sitio de Foxborough pero con escenario reconstruido totalmente y reinaugurado en 2000, a unos treinta kilómetros de Boston, Argentina y Leo tienen la chance de dibujar una minivenganza.

El equipo buscará un triunfo con razones contundentes para saltar a semifinales de la Copa América Centenario. Y ese 10 fenomenal, si pega un grito, alcanzará a Gabriel Batistuta como máximo goleador histórico de la Selección con 54 festejos. Y si tiene unos minutos y logra convertir, Sergio Agüero (34) podría subirse al tercer escalón del podio en ese mismo ránking junto a Hernán Crespo (35).

De Argentina depende que se trate de una noche inolvidable. A partir de las 20, deberá resolver el dilema que le presentará la sorpresa de este torneo: Venezuela, que eliminó a Uruguay (1-0) y que por muy poco no le ganó con varios suplentes a México (1-1). “Queremos darle una patada a la historia”, dijo Rafael Dudamel, el entrenador rival. Y subió la apuesta: “De este partido sale el campeón de la Copa”.

Se espera un desarrollo con protagonismo de Argentina y contraataque de Venezuela. Hay que saber que de empatar irán directo a los penales. La selección de Dudamel resignó la posesión contra uruguayos (41%) y mexicanos (34%). Apostó a esperar y a salir en velocidad, con sus volantes externos Guerra (Nacional de Medellín) y Peñaranda (la gran promesa, del Granada), más la velocidad de Josef Martínez y la potencia de Rondón, la figura, quien adelantó un partido “muy muy físico”.

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Martino no confirmó el equipo, pero sí a Messi, quien partirá desde la derecha e irá intuyendo los mejores sectores para exprimir. El Tata en el último ensayo paró un 4-3-3, con Augusto Fernández y con Gaitán entre los once, con Biglia y con Lavezzi esperando en el banco. ¿Será la fórmula ideal para quebrar a la ilusionada Venezuela? Se verá.

Habrá que estar atentos a las amarillas: Mascherano, Rojo, Augusto, Banega y Gaitán si reciben otra se perderían la semifinal en Houston, contra Estados Unidos. Pero esa será otra historia. Antes hay que acabar con los fantasmas.