Como familia de José Luis Depascuale, P. Keli, queremos expresar nuestro agradecimiento por todo lo que lo acompañaron durante su enfermedad, a través de innumerables muestras de cariño que expresaron en las oraciones, rosarios, eucaristías, noche heroica, gestos de cercanía, de caridad…
Es difícil nombrarlos a todos… en quienes mencionamos, sientan la gratitud infinita, dirigida en forma personal. Destacamos la calidez profesional y humana de los profesionales de la salud del Hospital Pintos de la ciudad de Azul, la cercanía de Monseñor Hugo Manuel Salaberry, de todos los sacerdotes, religiosos y consagrados, no sólo de la Diócesis de Azul, sino de tantas diócesis del país, Municipalidad y Cespaz de Saladillo.
Cada comunidad, cada persona que ha estado incondicionalmente con la escucha, con el silencio, con la ayuda, con las palabras de esperanza, de consuelo…son esa gente especial que Dios ha puesto en nuestras vidas y que mucho valoramos en este momento de dolor.
Pedimos a la Virgen María que los cubra con su manto, que los cuide y al Señor que los bendiga con su Amor, con su Paz.
María Rosa Depascuale
