Alumnos del ISFT N°135 y CREA Vallimanca juntos

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En el marco del espacio curricular de prácticas profesionalizantes, los alumnos del tercer año de la Tecnicatura en Administación Agropecuaria participaron de una reunión CREA. El encuentro tuvo lugar en la estancia Santa María del Recuerdo, en el paraje El Mangrullo. Convocados a las 8 de la mañana y con amenazas de lluvia en el horizonte, los alumnos asistieron por sus propios medios en medio del receso invernal, demostrando su entusiasmo con el proyecto.

La reunión comenzó con la presentación de la empresa durante aproximadamente una hora y media. En ella, además de conocer la visión, misión y valores de la misma, pudieron recorrer todo tipo de indicadores productivos, económicos y sociales. Producción de carne y

granos por hectárea, márgenes brutos de las distintas actividades, gastos indirectos y resultados operativos y globales, análisis de evolución patrionial y demás herramientas de gestión usualmente difundidas por el CREA.

Un párrafo aparte merece la sección de indicadores de impacto social. Una herramienta de gestión innovadora que está comenzando a utilizar este grupo. Estos consideran las contribuciones que hace la empresa a través de la mejora a los colaboradores y a al entorno.

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Además de los propios, la empresa utilizó los IndicAgro (una herramienta desarrollada por la Bolsa de Cereales de Córdoba) que combina lo social y ambiental en diferentes indicadores estandarizados. Esta reunión, en su conjunto, permitió a los alumnos conocer prácticas de gestión agropecuaria, que será su área de aplicación, desde un caso real. Observar la utilidad de las herramientas aplicadas, y una versión de vanguardia de gestión económica y prácticas innovadoras que serán cada vez más comunes en el entorno. Luego de la presentación y las preguntas que dejó planteadas la empresa para los concurrentes, se realizó la gira de campo. Con tres paradas diferentes, los colaboradores  fueron explicando los sistemas de producción y contestando las preguntas que los asistentes (empresarios y alumnos) hacian en las paradas.

Al finalizar la recorrida se armaron tres grupos de trabajo, uno de los cuales fue conformado por los alumnos del ISFT 135 y la docente María Laura Nuñez. Solamente interrumpido por una picada de campo y un guiso de lentejas (ideal para el clima del momento) tuvo que hacer su devolución en la etapa final de la reunión. La metodología CREA, como un sistema de mejora contínua en las empresas agropecuarias, indica que se planteen interrogantes que tenga la empresa, para que después de ser debatidos en grupos de trabajo, sean presentados a la empresa anfitriona como propuestas de solución a ellos. Para esta ocasión el grupo de alumnos tuvo que hacer lo propio. Eligieron de vocero a Matías Pascualetti y fue el grupo que primero tuvo que exponer sus conclusiones. Las preguntas habían sido complejas, desde mecanismos de profesionalización del Directorio de la empresa familiar, hasta evaluación de distintos negocios que podía hacer la empresa, pasando por cuestiones técnicas de producción.

Los aportes realizados por los alumnos tuvieron la seriedad y consistencia de los buenos profesionales, además de la mirada innovadora y de “fuera de la caja” de esta generación. Algo que genero admiración de los concurrentes. Una experiencia altamente enriquecedora.

por Fernando García Llorente