Mariana Gómez y Rocío Girat estaban charlando ayer al mediodía hasta que un policía de Metrovías se indignó al ver que las dos jóvenes se empezaron a besar. Al rato, llegaron oficiales de la Policía de la Ciudad y apresaron a Mariana durante tres horas en la estación Constitución de la línea Roca. La joven fue trasladada a una comisaría en Boedo, donde estuvo en un calabozo sola hasta las 21, después de sufrir golpes y constantes amenazas.
Claramente estamos viviendo un cambio de época, de persecución, violencia, represión por parte de las fuerzas de seguridad y cercenamiento de los derechos humanos. Desde nuestro espacio y principalmente como mujeres, acompañamos la lucha contra la discriminación por la orientación sexual, sean lesbianas, gays, transexuales, bisexuales, todas y todos tenemos derecho a elegir, a vivir y disfrutar a pleno de nuestra libertad
