La Subsecretaría de Desarrollo Local destaca los innovadores proyectos contra el Coronavirus: “Hay una solidaridad importantísima”

El ciclador de Zenobi, uno de los proyectos de los innovadores vecinos de la comunidad
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Tomás Chaime, Subsecretario de Desarrollo Local, habló sobre los proyectos solidarios que surgieron en Saladillo para prevenir o amortiguar el impacto del Coronavirus COVID-19 en la comunidad. Destacó la capacidad productiva e innovadora de las empresas saladillenses y la solidaridad para actuar en estos tiempos.

Nos llena de orgullo desde la gestión, y desde el área nuestra que es la que más está conectada a este tipo de proyectos de desarrollo de ideas y producción. Pero también como gestión en general: estos proyectos, que buscan como fin ayudar a la comunidad”, expresó en principio Chaime.

Cuando fue consultado por su labor en este sentido, Tomás explicó que fue “ayudar y facilitar las cosas para que los proyectos puedan seguir adelante. Algunos en mayor y otros en menor medida; hay cuatro proyectos que son los que más avanzaron”

MÁSCARAS PROTECTORAS

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Chaime contó que este proyecto “ya está medio llegando a su fin, llevamos casi 500 máscaras entregadas. La idea inicial era hacer 400, pero vamos a hacer algunas más de 500 para abarcar todos los servicios públicos con algún grado de riesgo a contagio de Coronavirus, sistema de salud. Es el que nace con innovación, coordinación y complemento con el Estado”.

Se trata de máscaras faciales protectoras de ojos, nariz y boca, es decir; de las vías de contagio del nuevo Coronavirus. Es un proyecto llevado adelante por Sistema Educativo, EEST N°1, CURS, ISFT 135 y el CFR, la red de Diseñadores Industriales de Saladillo (DISA), funcionarios municipales, Sociedad Rural, mercerías que donaron elástico, y vecinos en general. “Con las escuelas y diseñadores trabajamos codo a codo”, contó el Subsecretario.

SISTEMA DE DESINFECCIÓN POR MEDIO DE PULVERIZACIÓN

Este proyecto, obra de Fernando Cicaré y Diego Coronel, es de innovación mundial. Se trata de una cámara de desinfección que funciona a través de corriente eléctrica,  y lleva un líquido desinfectante. Una vez que una persona ingresa dentro de la cabina, parecida a un ascensor, se procede a la desinfección volumétrica, es decir: se le aplica una pulverización de un agente biocida que desactiva la carga viral que pueda tener la persona, tanto en el cuerpo como en la ropa.

“La participación nuestra como Estado fue ponernos a disposición. Es un desarrollo íntegramente de ellos, desde la idea hasta el desarrollo de llevarlo a cabo y construir el primer prototipo. Estamos en permanente contacto con ellos, la idea es acompañarlo. Ellos tienen mucho desarrollo, trabajan en muchísimos proyectos”, explicó Chaime.

CICLADORES DE AIRE (3 proyectos)

En principio, Tomás hizo referencia al proyecto de Juan Zenobi asegurando que “viene muy avanzado, le mete mucha garra a su proyecto”. Además, agregó: “Es el que viene más adelante en el tema de construcción, avance y pruebas. Ayudamos coordinando algunas reuniones con médicos para avanzar con el prototipo, y junto con la Cámara de Comercio intentamos conseguir un poco más de financiamiento para el desarrollo de la idea. A veces, la principal barrera para pasar de una idea a una realidad es el financiamiento”.

 “Esto nace a partir de una necesidad en la que vemos cómo se desarrollan las pandemias en los países, y estar preparados en Saladillo por si llega a necesitarse”, remarcó Chaime, quien además destacó: “Son de emergencia, la idea es no usarlo, pero si llega la necesidad que estén ahí. Y si se llega y se puede cubrir con la capacidad hospitalaria de respiradores, la idea es esa porque son de alta complejidad y están preparados para esto”.

Luego, habló de otro proyecto de Gustavo Closs y Pato Greco: Nos juntamos para avanzar en una idea parecida. En sí, la funcionalidad es la misma que la del proyecto de Juan, tiene otro desarrollo electrónico. Lo estamos ayudando en el sentido de coordinar con médicos para que los vean, que den su punto de vista porque son, al fin y al cabo, los que lo van a usar”.

Por último, mencionó otra de las innovaciones de Diseñadores Industriales de Saladillo, junto con la estudiante Loretta Morbiducci: “Están con un proyecto llamado ‘Oxigen’, sobre un prototipo español que bajaron de la página y, con algún retoque, están intentando armar el ciclador”.

Como idea general, Chaime repitió: “Es un orgullo para nosotros. A mí particularmente me interesan mucho estos temas. Esto es importantísimo porque es lo que desarrolla el capital social de nuestra ciudad. La innovación y tecnología es lo que va a darle valor agregado a las ciudades en esta reconfiguración económica del mundo”.