Es conocida y hasta casi aceptada en nuestra sociedad las pujas existentes entre los distintos establecimientos educativos del que egresan año tras año nuestros jóvenes.
Pintadas ofensivas, daños en los colegios y encontronazos callejeros entre los estudiantes se han vuelto un hecho corriente. Por eso como padres preocupados no solo por nuestros hijos sino por todos los estudiantes de nuestro querido pueblo es que narramos lo sucedido recientemente en un establecimiento bailable donde los egresados se juntaron el viernes 4 de agosto pasado.
Todo comenzó entre jóvenes de distintos colegios disputándose cuestiones a través de las redes sociales pero la situación preocupante, y es lo que motiva esta nota, fue que algunas egresadas ingresaron al boliche con tijeras supuestamente para «pelar» a algunas chicas de la EET1 Gral. Savio.
Nos preocupa mucho lo sucedido porque algo que comienza como una travesura juvenil puede (por ahí potenciado por ingesta de alcohol en las Previas) terminar con lesiones en algunos jóvenes que luego lamentaríamos todos como comunidad.
Y es por eso que escribimos e enviamos a quienes correspondan (autoridades, dueños de boliches, directores de instituciones educativas y padres) nuestra inquietud para evitar que esto u otros hechos que puedan poner en riesgo a los estudiantes se repitan.
¿Cómo es posible que no una sino varias jóvenes ingresen a un establecimiento bailable con tijeras?
¿Pueden las autoridades hacer que se revise a chicos y chicas al ingresar al mismo?
Sabemos que para la mayoría de los jóvenes esto es una travesura, pero también sabemos que puede terminar mal.
Grupo de padres de Egresados 2017
