Previo a la obra, Pepe Cibrián, brindó una conferencia de prensa en la que explicó: “Marica es un término despectivo que mas allá de definir una condición sexual humilla al hombre. Eso pretenden los asesinos. Pero al hombre no lo humilla una palabra; al hombre que enfrenta la vejación con dignidad el insulto lo exalta, lo enaltece”.
“Marica es un homenaje a uno de los más grandes dramaturgos de la lengua española; y es, también, un homenaje al hombre y sus convicciones”.
El punto de partida de esta propuesta que motivó la creación de Cibrián Campoy y que el año pasado se presentó en España con gran repercusión, es el asesinato del célebre poeta y dramaturgo español, fusilado en la madrugada del 18 de agosto de 1936. La causa de su muerte se debió, según algunas fuentes, a su vinculación con el Partido Popular, aunque otras versiones sostienen que fue ejecutado por su condición homosexual.
De este modo, la obra trata la supuesta relación entre Lorca y su asesino, en las horas previas a la ejecución, y más profundamente se revela como una denuncia contra el castigo a un pensamiento diferente.
El texto de esta obra alcanzó repercusión pública cuando el actor y realizador teatral lo expuso en el Senado de la Nación durante el tratamiento de la ley de Matrimonio Igualitario.
“Marica implica no sólo la condición de Lorca, por lo cual fue asesinado, sino la condición del alma, la creatividad, el arte, la grandeza de todos aquellos que a través de sus obras, sus ideas y aun a costa de su propia vida, modificaron la historia del hombre”, indicó.
