Rocio Chourrout es veterinaria, saladillense, mamá de dos hijas, y dueña de una gran iniciativa. Desde hace ya unos meses, Rocío recorre localidades y parajes en bicicleta, por caminos rurales, en busca de concretar el objetivo de visitar 43 escuelas saladillenses. “La idea es ir en bicicleta, llegar a la escuela, sacar una foto con el escudo, reponer agua y volver”, cuenta Rocio, quien además explica que “es mezclar la actividad deportiva -por así decirlo-, la actividad antiestresante y el conocer la historia de los pueblos, de las escuelas, eso me interesa”.
A propósito de cómo surgió esta actividad, Rocío cuenta que “necesitaba hacer algo desestresante. Me compré una bicicleta, luego las vueltas por el pueblo empezaron a quedarme chicas, y comencé a salir por caminos rurales que me parece mucho más entretenido, activo y menos riesgoso. Un día fui hasta Cazón y volví con la idea de recorrer localidades, pero después pensé: “Localidades no son muchas, parajes tampoco; pero escuelas hay en todos los parajes, localidades y mitad de caminos’”.
Chourrout llegó a recorrer ya hasta 122 kilómetros, cuando llegó a la escuela de Blaquier: “Mi familia dijo: ‘listo, si llegó hasta ahí ahora a las otras va a llegar’ (…) Me dijeron que estaba loca, que es lejísimos y que cómo iba a ir sola. Ahora se sumó una amiga desde la escuela 23”.
Rocío además contó el inicio: “Agarré un mapa de catastro, con mi suegra Regina Hansen que es maestra y directora jubilada, le pregunté donde estaban las escuelas y algunas le pregunté a otras maestras. Me falta la escuela 35 que ya la iré a encontrar o por lo menos saber donde estuvo. Los recorridos iniciales tardaban una hora, una hora cuarenta minutos; ahora son más largos. Por ejemplo, la próxima es la 28 en Santa Elina, que me va a llevar tres horas. Luego, la 29 está sobre la ruta nacional 205, cerca del arroyo Saladillo, junto con la 30 está en Los Huaycos”.
Por último, Chourrout contó cuál será su próximo objetivo una vez culminado este: “Cuando termine esto veré con qué arranco, quizás las vuelvo a hacer a todas porque las conozco; sé los caminos más fieles, los atajos. Quizás invite a alguien o convoque a más gente, me gustaría salir a hacerlo con amigas mujeres”.
