Mercedes Cabada, inspectora de educación del nivel inicial, contó de qué se trató la iniciativa que llevaron a cabo las directoras de todos los jardines de infantes de Saladillo: un afectuoso aplauso en la plaza principal, acompañando el masivo aplauso que, de manera virtual, se estaba llevando a cabo paralelamente con los niños y niñas del nivel inicial. Además, Cabada destacó el lado positivo de la pandemia en los métodos de trabajo.
“Fue un año muy complejo para nosotras, así que la idea era hacer una semana de despedida virtual a los niños y niñas de sala de 5 años. En este momento, cada uno de los niños y niñas con sus responsables de crianza están haciendo los aplausos en sus casas, y nosotras decidimos venir con las directoras de todos los jardines de Saladillo, hacer un aplauso y regalárselos a todos ellos”, contó Mercedes.
Luego, sumó: “Fue un año muy diferente, atípico, pero también nos dio una oportunidad re linda de conocernos y vincularnos mucho más con las familias; de estudiar y formarnos mucho más nosotras. Más allá de lo complejo que fue, fue una linda oportunidad para nosotras de trabajar de otra manera”.
