Martín Guzmán reconoció que existe una situación difícil, pero también remarcó que hay equilibrios muy delicados que mantener para que haya estabilidad en Argentina».
Después de semanas de todo tipo de especulaciones y versiones, el Gobierno confirmó este miércoles por la noche que no habrá un nuevo Ingreso Familiar de Emergencia (IFE). El encargado de revelar la novedad fue el ministro de Economía, Martín Guzmán, quien argumentó que “hoy no es el momento” para seguir adelante con esa medida.
Por qué no habrá IFE 4
«El IFE sirvió muchísimo. Protegió a gente que estaba en una situación muy dura. Generó un efecto real en la economía. Implicó un esfuerzo importantísimo. Las medidas de protección social van evolucionando. Hoy no es el momento de un IFE 4 porque hay que mantener ciertos equilibrios para también proteger a la actividad, proteger a la gente, a todo el país», afirmó el ministro en una entrevista con C5N.
Según reconoció el ministro “hay una situación muy dura”, pero al mismo tiempo subrayó que “hay equilibrios muy delicados que mantener para que haya estabilidad en Argentina».
«Por ahora no habrá IFE 4, pero nos guardamos flexibilidad igualmente por si la pandemia pega la vuelta como pasó en Europa», agregó después, dejando en claro que el programa podría ser reactivado en el futuro solo si el Gobierno necesita volver a una cuarentena estricta como a comienzos de año.
Cuál será el reemplazo
A modo de compensación ante la cancelación del IFE, Guzmán afirmó que el Ejecutivo buscará incentivar otros planes sociales que ya están activos.
«Iremos expandiendo programas existentes como el Potenciar Trabajo y las asistencias directas, como la AUH. Buscamos focalizar ayuda en los sectores que más lo necesitan», afirmó, al tiempo que adelantó que de acá hasta fin de año «la ayuda irá aumentando».
“Sin embargo, en lugar de hacerlo en forma de IFE, lo hacemos vía otros programas más focalizados en los que más lo necesitan. Entendiendo que todos lo que recibían el IFE están en una situación dura, pero al mismo tiempo hay un conjunto de políticas que buscan reactivar la producción y el empleo», concluyó.
Un anuncio que no sorprende
Si bien en las últimas horas había surgido la versión de que la Casa Rosada podía implementar un IFE más acotado, otras voces reconocían en off que no contaba con recursos para solventar otro gasto de $90.000 millones, que es el monto que debió desembolsar por cada versión del bono.
Pero no solo eso: en momentos en que Guzmán negocia con FMI la reprogramación de la deuda, el Ejecutivo necesitaba mostrar que estaba dispuesto a limitar el gasto, una de las exigencias del organismo para alcanzar el acuerdo.
