El Gobierno anunciaría en las próximas semanas el pago del bono de $10 mil, aunque esta vez tendría un alcance notablemente inferior en relación con la última edición.
Que el Gobierno no cuenta con el músculo de recursos para realizar el pago de un nuevo Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) en las mismas condiciones que los anteriores es un hecho.
Esta carencia, incluso, ponía en duda la ejecución de un desembolso más «focalizado», que era el plan B que algunos funcionarios mencionaron. Sin embargo, esa segunda opción parece haberse reflotado: el Gobierno analiza ahora ejecutar un nuevo bono de $10 mil, pero destinado a solo 2,5 millones de personas y no 9 como en la última edición. Y lo anunciaría en las próximas semanas.
Quiénes lo recibirían
Según informa este lunes La Nación, los beneficiarios que accederían al subsidio son los jóvenes de 18 a 25 años (este punto estaría aún en evaluación) y las mujeres jefas de hogar sin empleo ni ingresos. Ese grupo etario, de acuerdo con el análisis oficial, resulta el más golpeado por la crisis generada por la pandemia.
Los que no lo cobrarían más
Por su parte, los grupos que quedarían al margen del programa son:
- Beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH).
- Beneficiarios de la Asignación Universal por Embarazo (AUE).
- Monotributistas de las categorías más bajas.
- Personal de casas particulares.
Las razones del recorte
Por un lado, el Ejecutivo plantea que, tras la flexibilización de diversas actividades, la economía ya está en funcionamiento y “no hay margen para más asistencialismo”, destaca La Nación.
En ese aspecto, vale resaltar que cada cuota de IFE tuvo un costo de casi $90 mil millones. Este nuevo bono, en cambio, implicaría un desembolso de unos $28 mil millones.
Otro factor de peso es la negociación que la Argentina emprendió con el Fondo Monetario Internacional (FM). Este martes arriba al país una misión encabezada por Julie Kozack y Luis Cubeddu y la Casa Rosada necesita mostrar un plan fiscal ordenado.
De todos modos, el objetivo es no desatender el clima social y brindar una ayuda que permita pasar el fin de año sin sobresaltos en este ámbito.
Qué se dice oficialmente
Una de las últimas funcionarias en referirse públicamente al tema fue María Fernanda Raverta, titular de Anses, quien en una entrevista realizada la semana pasada afirmó que el IFE fue una iniciativa “excepcional”, y remarcó el costo que debió asumir el Gobierno ante cada desembolso: “Es enorme en términos presupuestarios”.
“Ahora se está evaluando, porque la verdad no estamos en la misma situación”, señaló Raverta, haciendo referencia a las actividades que se fueron liberando en los últimos meses, principalmente en la zona del AMBA.
